DS4 retoma el refinamiento francés
JESÚS A. BORNAO, 16 de octubre de 2021
Citroën comenzó en el año 2009 a pensar en el desarrollo de una submarca de vehículos, claramente diferenciada, que pudiera ser competencia de los vehículos de representación alemanes, dando para ello un salto de calidad en cuanto al acabado de los vehículos DS.
Citroën toma las siglas de DS, de la denominación de su mítico modelo Tiburón, fabricado entre los años 1955 y 1975 con una tecnología revolucionaria tanto en suspensión como en motorización. Con esa vitola de exclusividad que transportaba a los presidentes de la República fabricó los modelos CX y SM mediante un convenio con Maserati, que aportó la motorización.
La categoría más importante en el mercado automovilístico europeo es la categoría C. Las marcas premium compiten en él ofreciendo siluetas y sensaciones tan diversas como las que pueden suscitar una berlina, un SUV o un cupé. DS Automobiles ha puesto en el mercado este año 2021 su modelo DS 4, que se adapta a estas tres formas de entender el automóvil con un solo modelo con una estética absolutamente refinada y un diseño en el que caben tres siluetas: berlina, SUV y DS4 Cross.
El DS 4 es un vehículo compacto que se encuadra en el segmento C por dimensiones. Con sus 4,40 metros de largo se sitúa en la parte alta de su categoría, por delante de rivales como el Audi A3 (4,34 metros) o el BMW Serie 1 (4,32 metros), y ligeramente por detrás del Mercedes Clase A (4,42 metros). Cuenta con un diseño exterior de marcada elegancia, tanto por sus trazos y sus detalles como por su concepción a medio camino entre un compacto cinco puertas al uso y un SUV cupé.
En su interior brilla con luz propia la pasión por los pequeños detalles y las técnicas exclusivas que DS Automobiles ha sabido heredar de la tradición del lujo francés. La deportividad y el refinamiento de los automóviles gran turismo están representadas en el habitáculo con materiales como el Alcántara, presente en el salpicadero, el panel de las puertas y toda la consola central. Los asientos de alta densidad con tejido Basalto con Alcantara están realzados con un pespunte específico oro y carmín que retoma los colores de DS Performance. El volante está adornado con una pieza única de carbono forjado en el brazo inferior. Los pedales y reposapiés de aluminio realzan el interior cuidado y dinámico.
La armonía del interior también se ve reforzada por la iluminación ambiental indirecta personalizable, pensada para destacar los elementos laterales. El ambiente sonoro cuenta con un conjunto de alta fidelidad Focal Electra de 690 vatios y 14 altavoces con ventanillas acústicas laterales, otra primicia en el segmento.
La gama de motores del DS 4 está compuesta por tres motores PureTech turbo, en potencias de 130 CV con un cambio automático por convertidor de par de 8 relaciones (versión de 1,2 litros y 180 CV, y 225 CV en la de 1,6 litros, así como por un único turbodiésel BlueHDi de 130 CV y 1,5 litros. Todos ellos envían el par a las ruedas delanteras por medio de EAT8).
Asimismo, también dispone de una versión híbrida enchufable E-Tense con una potencia combinada de 225 CV y con la etiqueta cero de la DGT. Esta motorización está compuesta por un 1,6 litros turbo de gasolina y un motor eléctrico de 110 CV integrado en la caja de cambios automática e-EAT8, contando además con una batería de iones de litio de 13,2 kWh de capacidad bruta, con la cual es capaz de conseguir una autonomía en modo completamente eléctrico superior a 50 km.
Así, con esa polivalencia que le da el diseño, el DS4 no se queda cojo en ninguna de sus variantes.