Un distrito con enormes carencias
LUIS SEGUNDO LORENTE JIMÉNEZ SECRETARIO GENERAL DEL PSOE DISTRIT, 22 de julio de 2022
Han pasado ya más de tres años desde que el equipo de Almeida-Villacís llegó a la alcaldía, y creo que es bueno hacer un balance del estado del Distrito a menos de un año para las elecciones. Salamanca, en el imaginario colectivo, es un distrito rico, sin graves problemas, pero los que vivimos en él sabemos que eso no es así. Veamos un breve resumen de esos problemas y carencias.
El Distrito Salamanca está a la cola de escuelas infantiles públicas municipales. Solo tenemos una, con una lista de espera del doble que el número de plazas. Eso implica que muchos vecinos o se pagan escuelas infantiles privadas bastante caras, por cierto o tienen que renunciar a conciliar vida laboral y familiar. Y las mujeres son las que salen perjudicadas.
El equipo Almeida-Villacís no ha mejorado la limpieza. Todo lo fiaron a los nuevos contratos. Pues bien, el Ayuntamiento, con los nuevos contratos divididos en lotes, va a invertir 80€ de media por habitante en limpieza. Hay distritos en donde se va a llegar a invertir 115€ de media. Los hay también peor que Salamanca, pero desde luego cualquiera que pasee verá que la limpieza sigue por lo menos igual de mal que estaba antes.
El Distrito Salamanca se ha quedado sin cines. Y lo peor es que ha sido con participación activa del Ayuntamiento, aprobando un plan especial de ordenación urbana, para convertir el Cine Conde Duque Goya en un supermercado. Tenían alternativas (protección urbanística, potestad de planeamiento, ayudas fiscales, promoción cultural, etc.), pero optaron por lo fácil, que es no pelear por el interés general y apostar por el interés privado. Es una pena ver el estado en que se encuentra el Conde Duque Goya.
El Distrito Salamanca no está protegiendo su patrimonio cultural como debe. La prueba es las veces que el conjunto monumental del Dolmen de Dalí es mancillado con pintadas o como espacio para hacer necesidades fisiológicas. Incumpliendo por cierto los acuerdos del pleno de la Junta Municipal.
Por desgracia, el Distrito tiene una importante carencia de espacios culturales y salas de estudio. Salamanca tiene menos bibliotecas públicas municipales que Chamartín, Ciudad Lineal o Centro, algo que llevamos arrastrando muchos años. Ampliar el C.C. Buenavista - David Gistau era una enorme necesidad (como cualquiera que haya ido alguna vez a estudiar allí en época de exámenes sabrá). Vamos con muchos años de retraso en esa ampliación. Bien es verdad que eso el actual equipo de la Junta lo ha heredado del anterior, que no pensó en el interés general, sino en el de unos pocos. Pero encima, cuando ha habido que hacer obras en la Biblioteca Manuel Alvar, la realidad es que la Comunidad no ha hecho las obras que competencialmente le correspondían, y que tiene que ser el Gobierno de España el que se encargue de hacer todas las obras (las que le tocaban que ya hizo y el resto). 2,81 millones de euros de presupuesto del Ministerio de Cultura, que se suman a 1,4 millones de euros que ya ha invertido el Gobierno de España en esa biblioteca.
Tampoco creo que en la cuestión de las terrazas se haya peleado por el interés general. Se ha pretendido normalizar una situación de excepcionalidad. Y claro que los socialistas queremos que se salven puestos de trabajo. Pero tiene que haber un equilibrio, no puede ser a costa de pérdida de plazas de aparcamiento. Esto es como en las escuelas infantiles: no todo el mundo puede permitirse una plaza de parking privada. El negocio privado, muy lícito, no puede ser a costa de los espacios de los vecinos.
Y finalizo con un ejemplo muy paradigmático de lo que ha sido la gestión de Almeida-Villacís en el Distrito. El Distrito Salamanca no tiene espacio de igualdad. Dicen que lo harán en el solar de Francisco Remiro, pero la realidad de la gestión de la Junta fue paralizar la construcción del espacio de igualdad, con el procedimiento administrativo muy avanzado, cuando solo había que notificar al adjudicatario. Esto no fue un problema de gestión, fue de pura ideología del PP con la complicidad de Cs.
En definitiva, Salamanca es un distrito con enormes carencias. Las teníamos al empezar la legislatura y, por desgracia, seguimos con esos mismos problemas. Que de primeras no se vean no quiere decir que no existan.