‘Me apetecía contar historias con mi propia voz’
En mayo os acercamos a Carlota Lainez, joven vecina de 23 años que, pese a su corta edad, ha participado en el rodaje de varios cortos ambientados en el Distrito, uno de los cuales, titulado Te quiero, fue seleccionado por CortoEspaña. También dirigió un cortometraje para la campaña de crowdfunding ¿De qué color es el color carne?, que finalizó el proyecto con éxito llegando a recaudar 16.000 euros, y ha colaborado en calidad de ayudante de dirección en la obra Un espíritu burlón, dirigida por César Oliva y estrenada en noviembre de 2015 en el Teatro Fernán Gómez.Esta guapa barcelonesa, afincada desde hace unos años en nuestro distrito, es una muestra clara de esa juventud de la que tan orgullosos nos sentimos, por su compromiso y responsabilidad en ayudar a la mejora de nuestra sociedad y de la convivencia, y en este caso puntual, a crear sensibilidad y facilitar la comprensión sobre conflictos que producen discriminación por sexo o raza.
En tus palabras, ¿quién es Carlota Lainez?
Soy una joven con muchas ganas de hacer cosas, y si esas cosas pueden contribuir a hacer de esta sociedad un lugar mejor en el que vivir, sería ya perfecto.
¿Cuál ha sido tu trayectoria?
Desde pequeña he estado haciendo actividades artísticas, desde ballet hasta interpretación. Los estudios reglados nunca me motivaron demasiado, de todas formas terminé el Bachillerato sin una idea muy clara de qué hacer y decidí probar suerte con lo que siempre me había gustado: la interpretación. Después de un tiempo me di cuenta de que lo que me apetecía realmente era contar historias, historias con mi propia voz, así que decidí dejar la carrera de interpretación y matricularme en dirección de cine, y me vine a Madrid.
¿Y cuál ha sido tu mayor reto?
Venir a Madrid. Decidir empezar una nueva vida en un sitio que no es el tuyo. Empezar de nuevo aquí e ir creando tu propio mundo poco a poco y por ti misma.
¿Qué es lo que más te motiva?
Llevo un tiempo dándole forma a un proyecto. Se trata de una productora que se llama WitchesFilm y con la que queremos contar las historias de las nietas de las brujas que nunca pudieron quemar.
¿Cómo ves el presente y el futuro de los cortometrajes en Madrid?
Pienso que, gracias a las redes sociales, la gente se está acostumbrando a consumir piezas audiovisuales pequeñas, cortas y con un mensaje claro y directo. Y nosotros, la gente joven que quiere hacer cine y que no dispone de muchos recursos, tenemos que aprovechar esta oportunidad.
Proyectos a futuro, u otros proyectos en los que participas actualmente…
Estamos preparando un proyecto que se va a financiar mediante el crowdfunding desde la plataforma Verkami. El objetivo es intentar recaudar dinero para rodar un cortometraje. Se trata de la adaptación del libro infantil Yo voy conmigo, de Raquel Díaz Reguero, que va por la tercera edición en dos años y que habla sobre la importancia de querernos a nosotros mismos por lo que somos. Es un cuento precioso, que descubrí una tarde con mi hermana pequeña y me emocionó. Creo que es muy importante que este tipo de mensajes lleguen al mayor número de niños y niñas posible… y también de adultos, incluida yo misma [risas].
¿Qué es lo que más te gusta de nuestro distrito?
Me encanta mi rincón de La Guindalera, un lugar especial en el que aun estando en medio de la ciudad te sientes tan acogida y tranquila como en un pueblo. Ir al mercado, el olor a pan recién horneado de mi calle y la gente que te saluda por la calle, son cosas sencillas que me encantan.
Y para terminar, ¿cómo es tu relación con Distrito Salamanca?
Vivo aquí con mi familia, es nuestro hogar, y siempre que pueda me gustaría rodar escenas en el barrio.