Conociendo la figura del pintor Manuel Benedito
JMD SALAMANCA / REDACCIÓN, 5 de julio de 2023
Este mes de junio, en el que hemos conmemorado el 60ª aniversario del fallecimiento de Manuel Benedito (20 de junio de 1963), el vecindario ha tenido la oportunidad de conocer la amplia obra del pintor valenciano en las instalaciones del Centro Cultural Emilia Pardo Bazán, con la exposición gratuita realizada en colaboración con la fundación que lleva su nombre compuesta por una escogida selección de imágenes realizadas por los fotógrafos más relevantes de cada periodo.
Nacido en Valencia el 25 de diciembre de 1875, Manuel Benedito recibió su formación en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos. Con el traslado de su familia a Madrid empieza como alumno del maestro Joaquín Sorolla y, entre los años 1900 y 1904, obtiene un pensionado en la Academia Española de Bellas Artes en Roma. Durante esta etapa realiza viajes por Italia, Francia, Bélgica y Holanda, donde adquiere conocimientos de los grandes pintores europeos y de las grandes escuelas pictóricas. Tras esta etapa y, con la obra Canto VII del Infierno de Dante obtiene la primera medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes.
Académico de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando (Madrid) y de la de San Carlos (Valencia), a lo largo de su trayectoria también fue miembro de la Hispanic Society de Nueva York, así como de otros museos e instituciones.
Cuatro partes
Amante de la pintura al aire libre durante sus años de juventud, los paisajes y ambientes con amplia luz van dejando paso, poco a poco, a un nuevo estilo más centrado en el retrato de estudio, como los célebres de Cléo de Meróde, Pastora Imperio, la condesa de Yebes, la señora de Moncada, Eduardo Dato, Jacobo Gómez de la Loma, el general Weyler, José Sánchez Guerra o de su maestro Joaquín Sorolla. Durante los inviernos pintaba retratos; en verano, paisajes y bodegones. A partir de los años veinte su camino ya está definitivamente trazado y su pintura es expresión de sus convicciones, de su formación y de su sentimiento.
La muestra ha estado dividida en cuatro partes en las que se han reflejado diferentes etapas de la vida y obra del pintor:
Los comienzos y la estancia en Roma. Durante su estancia en diferentes países europeos, Benedito perfeccionó las técnicas aprendidas durante su pensionado en Roma. Durante esos años refleja un entusiasmo, ganas de aprender y conciencia de sentirse afortunado ante las posibilidades que le abría la estancia romana.
Real Academia y la Escuela de Bellas Artes de San Fernando. Benedito ya era un gran pintor de éxito. En 1923 fue elegido académico de la Real Academia de San Fernando, en donde en 1924 fue nombrado para ocupar la Cátedra de Colorido y Composición. Su discurso de ingreso sobre El porvenir de la Real Fábrica de Tapices y Alfombras de Madrid le llevó años más tarde a ser director de dicha institución.
El estudio del pintor. Desde su llegada a Madrid (1895), el pintor valenciano tuvo diferentes estudios en calles como Jacometrezo, Barquillo, Don Ramón de la Cruz o Claudio Coello, hasta instalarse definitivamente en la calle de Juan Bravo 4, donde está localizado su museo y fundación.
Los temas de su pintura. Amante de la pintura al aire libre en sus primeros años, su multitud de obras paisajísticas refleja la influencia de su maestro Joaquín Sorolla. La luz y el ambiente de cada composición van dejando paso a composiciones de estudio, donde realiza bodegones y los retratos, con los que llegó a ser uno de los pintores especializados más importantes de la época.