La polinosis o alergia a pólenes es, de todos los procesos alérgicos, el más frecuente en Madrid. Y es la primavera la época en la que sus síntomas se manifiestan con mayor intensidad.
Los pólenes son granos microscópicos que representan los elementos reproductores masculinos de árboles y plantas. Algunos pólenes son transportados por el aire en grandes cantidades, y cuando entran en contacto con las personas alérgicas se produce la reacción y la aparición de los síntomas de rinitis, conjuntivitis o asma.
Cada polen se produce en una determinada época del año en función del clima y de la localización geográfica. En Madrid, los cuatro tipos polínicos más relevantes son: arizónica, plátano, olivo y gramíneas, los tres últimos de aparición primaveral.
La polinización del primero, el del plátano, ocurre entre mediados de marzo y mediados de abril, durando aproximadamente dos semanas. Poco después, y hasta entrado el verano, polinizan los olivos y las gramíneas, siendo estas últimas las más relevantes en nuestro entorno, pudiendo mantener niveles significativos de seis a ocho semanas.
Por tanto, es muy importante conocer el tipo de polen al que uno es alérgico, para así poder tomar las medidas preventivas oportunas y tomar la medicación que le haya indicado su alergólogo. Puede consultar los niveles de pólenes en distintas direcciones de internet, como www.polenes.com y www.madrid.org/polen.
La intensidad de la polinización de cada planta es variable año a año, dependiendo no solo del clima primaveral, sino de lo ocurrido en las estaciones previas. Este año, seco en otoño y frío y muy lluvioso en invierno, ha provocado que las polinizaciones invernales hayan sido menores que en años precedentes. Sin embargo, en primavera parece que ocurrirá todo lo contrario. Las estimaciones de la SEAIC (Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica) para este periodo indican que tendremos unos niveles polínicos moderados. Sin crear alarmismo, es muy probable que los niveles sean muy superiores a los de 2017. No obstante, las temperaturas y niveles de pluviosidad en primavera serán las que tengan la última palabra.
Algunos consejos que deben tener en cuenta las personas alérgicas al polen para que les afecte lo menos posible son:
- Si toma medicación prescrita por un alergólogo, empezar a tomarla cuando su médico le haya indicado
- No hacer actividades deportivas al aire libre
- Evitar salir los días secos y muy ventosos
- Si tiene que estar mucho tiempo al aire libre y es muy alérgico, utilizar mascarilla con filtro
- Viajar en el coche con las ventanillas cerradas
- Ventilar la casa solo un rato por la mañana y por la noche. El resto del día mantener las ventanas cerradas
- No tender la ropa fuera de casa
Dr. César Rivas-Plata Sierra
Alergólogo del
Hospital Nuestra Señora del Rosario