‘La tecnología va a seguir creando retos jurídicos para los ciudadanos y empresas’

Leticia López-Lapuente, licenciada en Derecho y socia en el despacho Uría Menéndez, donde dirige el área de protección de datos y comercio electrónico

En el mes de las fiestas les traemos a la licenciada en Derecho Leticia López-Lapuente, vecina del Distrito y actualmente socia en el despacho Uría Menéndez desde 2019. Dirige el área de protección de datos y comercio electrónico y cuenta con más de 18 años de experiencia asesorando a empresas del sector tecnológico y a empresas financieras e industriales en cuestiones de tecnología y protección de datos personales. Entre sus funciones, negocia contratos tecnológicos, asesora en ciberseguridad, participa en fusiones y adquisiciones con componentes tecnológicos y, en general, se especializa en tecnologías disruptivas como el comercio electrónico, tecnologías biométricas, inteligencia artificial o big data. Asimismo, actualmente imparte clases sobre derecho digital y ciberseguridad en varias universidades. También ha participado en la edición de numerosos libros y podcast especializados como Ciberseguridad: prevención y estrategias jurídicas, Regulación de criptoactivos, presente y futuro, La normativa reguladora de las redes sociales: más allá de la normativa de protección de datos, y el recién publicado Tratado de derecho digital. 

Nuestra entrevistada, ponente en el evento “Transformación digital de la abogacía y el Derecho”. Club Empresarial ICADE, 2019. Foto: Cedida

En sus palabras, ¿quién es Leticia López-Lapuente?

Hoy estoy aquí como vecina del Distrito Salamanca, pero para que me conozcáis mejor os diré que soy abogada especializada en temas de tecnología en un despacho grande, Uría Menéndez. Soy madre de dos hijos, soy familiar y muy viajera. Soy también muy madrileña.

De su trayectoria, ¿de qué momentos tiene los mejores recuerdos?

El comienzo de mi carrera profesional, los primeros años en el despacho, son probablemente los que más me han marcado. Yo empecé muy joven en un despacho grande y reputado como es Uría, y eso me permitió aprender muchísimo, sobre todo de observar a compañeros con más experiencia.

¿Y cuál ha sido su mayor reto?

Cada día me levanto y me pongo como reto buscar mi equilibrio. Es un reto que seguro comparto con muchos vecinos del Distrito. Yo soy madre, soy profesional, tengo una gran familia, tengo muchas aficiones. Mi mayor reto ha sido crecer y desarrollarme como profesional en un entorno enormemente exigente mientras formé una familia. Los años en los que fui madre fueron también clave en mi carrera, como le pasa a muchas mujeres hoy en día. A mí me ayudó mucho el hecho de que realmente me gusta lo que hago en mi vida profesional, porque no es nada fácil llegar a todo. También me ayudó que no me gusta nada renunciar a lo que creo importante, así que intento organizarme y robarle al día las horas que no tiene. Como os digo, encontrar ese equilibrio es un reto que trabajo y persigo cada día.   

¿Qué es lo que más le motiva de su labor como jurista?

Los primeros años te forjan como profesional, pero la del abogado es una profesión en la que nunca dejas de estudiar. Yo me dedico a asesorar en normativa digital y tecnológica. Cada día surgen apps que nos geolocalizan, sistemas que nos permiten comunicarnos desde el teléfono con Administraciones, empresas u hospitales, firmamos los documentos con nuestra huella desde el teléfono o haciendo un clic, etc. Todo esto nos hace avanzar como sociedad. Por ejemplo, durante la pandemia la tecnología fue clave para la sociedad y la economía. Pero estas nuevas tecnologías también generan nuevas dudas y cuestiones jurídicas a los ciudadanos y empresas. Las leyes cambian cada día para adaptarse a estos cambios tecnológicos. En mi práctica profesional, por tanto, no se puede dejar nunca de estudiar y de reinventarse, y eso es, sin duda, lo que más me gusta de mi profesión.

¿Cómo ve la situación de la protección de datos y la ciberseguridad en nuestra ciudad?

Les diría a nuestros vecinos que existen normas, muchas de ellas europeas, que buscan proteger nuestros datos y darnos, como ciudadanos, más control sobre nuestra privacidad. Las organizaciones, grandes y pequeñas, públicas o privadas, deben respetar esas normas, y esto es un reto para el sector empresarial y la Administración.

Pero también es importante que cada uno de nosotros pongamos atención y seamos curiosos y cautos: curiosos para interesarnos e intentar entender qué medios tenemos a nuestro alcance para incrementar ese control sobre nuestros datos y para enseñar a las nuevas generaciones que la privacidad es importante. La educación digital y en privacidad debería ser prioritaria. Y también debemos ser cautos en lo que compartimos por medios digitales y frente a los nuevos riesgos de ciberseguridad.   

¿Proyecto en el que participa actualmente?

En el día a día asesoro a empresas grandes que desarrollan o implantan tecnologías muy disruptivas. Es importante dar un asesoramiento sólido que les ayude a cumplir con las normas digitales y reducir riesgos para los ciudadanos. Pero también desarrollo actividad como profesora en la universidad. Me encanta mantener ese diálogo con las nuevas generaciones de abogados y ver qué tienen que aportar a la profesión. Tanto con los abogados más jóvenes del despacho como con los futuros graduados en Derecho, es bueno mantener una conversación abierta y formativa.    

Propósitos a futuro, u otras intenciones...

En un entorno con tantas incertidumbres como las que vivimos, mis propósitos más claros los fijo a corto plazo. Mis metas son ese equilibrio personal y mantener el desarrollo profesional de los que hablaba. A más largo plazo, creo que la tecnología va a seguir creando retos jurídicos para los ciudadanos y empresas. Me gustaría seguir trabajando para que, entre todos, logremos una sociedad madrileña, europea y global que integre lo digital de una manera armónica y para que ciudadanos y empresas gocemos de un marco jurídico claro y seguro en esta materia.     

Para terminar, ¿cómo es su relación con nuestro distrito?

Llevo casi 20 años viviendo aquí, toda mi vida adulta. Nací muy cerca, además, en Retiro. Soy una enamorada del Distrito Salamanca, y es el sitio que hemos elegido como familia. No es solo por sus parques, arquitectura, museos, comercios o restaurantes, sino por la vida urbana, familiar y cercana a todo lo que pasa en Madrid que me ofrece este distrito. Lo conozco bien porque además, como tengo cierta tendencia a mudarme de casa cada pocos años, ya he vivido en Fuente del Berro, Goya y Guindalera. Me quedan pocas zonas del Distrito por probar. Mi marido y su familia son de aquí además. El Distrito Salamanca es mi hogar y aquí seguiré.

Leticia López-Lapuente, en la ITechLaw European 2021 Conference, celebrada en Lisboa este mes de noviembre. Foto: Cedida