HISTORIAS DEL DISTRITO. Mujeres desconocidas, poco conocidas y olvidadas

“Para la mayor parte de la historia, ‘anónimo’ era una mujer”.  Virginia Woolf

Y  podríamos añadir que de muchas de ellas nada se sabe. Existen muchas calles en nuestra ciudad, y muy especialmente en Guindalera, con nombre de mujer, pero sin datos de quiénes fueron.

• María Teresa (Guindalera, ¿?), entre calle Cartagena y avenida de Camilo José Cela.
• Antonia Ruiz Soro (1928), entre avenida de Camilo José Cela y calle La Poveda.
• Concepción Bahamonde (1928), entre Rafael Juan y Seva y la de Marqués de Mondéjar.
• Rafaela Bonilla (1902), entre Martínez Izquierdo y avenida de los Toreros (antes llegaba hasta Ruiz Perelló).

En general, en toda la ciudad tenemos ejemplos similares, con pocos datos más, pero pueden servirnos para conocer quiénes pudieron haber sido.

Podemos intuir quiénes fueron comparando lo que sabemos al respecto de Candelaria Mora (Arganzuela, 1924) y Amalia Marcos (Vallecas, 1971): eran las propietarias del terreno donde se trazó la calle. Matilde Hernández (Carabanchel, 1927), además de propietaria, fue nombrada hija predilecta de Carabanchel Bajo.

En otras ocasiones sabemos que fueron las mujeres del constructor de la calle, como Rafaela Pascual (Moncloa-Aravaca, 1958), o tenían algún negocio allí, como Tomasa Ruiz (Carabanchel, 1906), que al enviudar continuaría con la industria del marido, dedicada al aprovechamiento de los animales muertos, cuya concesión tenía en el municipio de Carabanchel Alto.

El teatro del Príncipe, hoy Teatro Español, en la plaza de Santa Ana.

Un espacio singular son los Jardines de las Mujeres de Ventas (2019), entre la calle Ramón de Aguinaga y Rufino Blanco, en el lugar donde estuvo la cárcel (1933-1969).

Finalmente, nos interesa la de Francisca Moreno (Distrito Salamanca, barrio Goya), entre las calles Alcalá y Goya. Anteriormente era conocida como Particular (1885).

Francisca Moreno de Velasco (1790- ¿?) era hija de Francisco Javier Moreno (1748-1836), compositor y músico (primer violín) de cámara del infante Gabriel de Borbón (1752-1788) y de las orquestas de las catedrales de Zamora y Santiago de Compostela, San Carlos en Lisboa y de vuelta a Madrid en el teatro de los Caños del Peral. Nada sabemos de la biografía de la madre, solo que era de Noia (La Coruña). En La Coruña nació Benita (1792-1872). Con ellas el compositor contó con dos hijas que fueron tan célebres como la Caballé, Berganza, De los Ángeles... Pertenecen a la generación de María Amigo, Lorenza Correa, Joaquina Arteaga...

Ambas viajaron a Italia en 1802 por su decisión. Allí Benita empezó a despuntar antes que Francisca. Y lo hizo ni más ni menos que debutando (1808) en el Gran Teatro La Fenice de Venecia. Después volvieron a Madrid y fueron contratadas en el teatro de La Cruz por Bernardo Gilcomo.  En el teatro del Príncipe actúan por invitación del empresario Isidoro Márquez. Se las denominaba “cantatrices”.

Para celebrar el casamiento de Fernando VII con Isabel de Braganza (28/09/1816) se realiza una función el 29 de septiembre de 1816 en el teatro del Príncipe (el Teatro Español),  L´italiana in Algeri, con música de G. Rossini y letra de Angelo Anelli. Se hace en español, dado que hasta 1821 está prohibido en otros idiomas.

Sabemos que después viajaron a Cádiz, entonces una ciudad muy importante, y donde se apreció el trabajo de las hermanas Moreno. Sin embargo, algo ocurre, dado que desde 1818 actúan por separado, quizás porque Benita pasó a formar parte de la compañía de Esteban Cristiani (1770-1829) y posteriormente de la de Francisco Aznar.

Francisca representa Gli Orazzi e i Curiaci de Cimarosa (1818). Es una de las últimas representaciones que conozco. Después, le pierdo el rastro...

En Valencia solo parece presentarse Benita (1818 y 1828). También en Valladolid.

Benita enviudó en 1921, contrajo matrimonio con Antonio Ponce y adoptó el apellido de éste. Se traslada un tiempo a La Coruña (1845) y establece una academia. Vuelve a Madrid (1851) y establece otra academia (plaza Santa Ana).

Resulta llamativo que, resultando más conocida Benita, el 2 de marzo de 1887 se inaugure la calle Francisca Moreno por el entonces alcalde de Madrid José Abascal.

JOSÉ ABASCAL, el alcalde de Madrid bajo cuyo mandato se inaugura la calle Francisca Moreno.