Vuelve el Smart de cuatro puertas

JESÚS A. BORNAO

Nadie podía suponer hace dieciséis años, cuando un fabricante de relojes (Swatch) y la prestigiosa Mercedes llegaron a un acuerdo de fabricación, que se pudiese construir un vehículo de dos plazas eminentemente urbano y dotado de toda la tecnología posible y con todos los elementos de seguridad de vehículos de mucho más precio. Los comienzos, en el área comercial, no fueron todo lo exitosos que se esperaba de un vehículo innovador; sin embargo, el transcurrir de los años ha hecho que el vehículo sea un icono del mundo urbano por su facilidad de aparcamiento y por su estética.

Ahora que en poco tiempo se han puesto de moda vehículos con personalidad propia como el Fiat 500, todo un éxito del diseño italiano, Smart se ha sumado a esta tendencia con su nuevo Forfour, totalmente diferente al anterior y con diseño en su ADN. A diferencia de sus antecesores, que fueron desarrollados en colaboración con Mitsubishi, los nuevos Smart nacen como fruto de la alianza entre Mercedes-Benz y Renault (de hecho, el nuevo Twingo de motor trasero comparte desarrollo con los nuevos Smart), manteniendo su enfoque urbano, en el que no tienen rival en cuanto a maniobrabilidad, con un radio de giro récord (menos de 7 m para girar 180º en el modelo de 2 puertas).

El Smart Forfour tiene una longitud de 3,50 metros, con cinco puertas y cuatro plazas. El habitáculo tiene cuatro plazas. Las delanteras son amplias, y aunque las plazas traseras sean más reducidas cumplen perfectamente su función de trasladar a dos pasajeros más en un desplazamiento urbano e incluso en un recorrido más o menos pequeño en carretera, y cuenta con una accesibilidad al vehiculo fácil por sus cuatro puertas.
La capacidad del maletero es 185 litros. Con las plazas traseras abatidas, el volumen de carga llega a 975 litros. El respaldo del asiento del acompañante también se puede abatir para facilitar el transporte de objetos largos.

Se comercializa con tres niveles de equipamiento que se llaman “Passion”, “Prime” y “Proxy”. De serie en todos ellos encontramos, entre otras cosas, el cierre centralizado con mando a distancia, las luces diurnas de leds, el programador de velocidad, el ordenador de viaje y los elevalunas delanteros eléctricos. Los dos asientos traseros tienen anclajes Isofix, y el del acompañante puede tenerlo en opción. Algunas otras opciones son: volante multifunción forrado en cuero, pantalla de 3,5 pulgadas a color en la instrumentación y calefacción en los asientos delanteros. Por supuesto, tanto la seguridad como el nivel de equipamiento de los nuevos Smart superan con creces los de su predecesores, contando con todos los sistemas de asistencia de última generación (asistente de cambio de carril, ángulo muerto, alerta de colisión…). Destaca como novedad el nuevo asistente para viento lateral, que corrige los cambios de trayectoria involuntarios provocados por los peligrosos golpes de aire.

Todos los nuevos Smart incorporan las modernas mecánicas de 3 cilindros de alta eficiencia con 71 y 90 CV, disponibles tanto para el modelo de 2 puertas como para el Forfour que, en esta nueva generación, también cuenta con el grupo propulsor montado sobre el eje trasero, como el Renault Twingo. El motor va colocado bajo el piso del maletero. De este modo, el modelo más grande puede optimizar el espacio interior pese a sus recortadas dimensiones, con un maletero que alcanza los 975 litros de capacidad con los asientos abatidos. La posibilidad de personalizar el coche con más equipamiento es tan sumamente amplia que se necesitaría una página completa para describirla.
Se parte de un precio de adquisición de 12.500 euros. El fabricante añade la atractiva posibilidad de adquirirlo con una entrada de 700 euros, un pago de 130 euros mensuales durante cinco años y un valor residual de 6.000 euros aproximadamente, que podrá abonar el comprador o bien devolver el vehículo.

Con una estética agradable, un buen comportamiento urbano, bajo consumo y facilidad en la financiación, puede ser la opción para quien desee un vehículo desenfadado y sin complicaciones y que pueda transportar a cuatro personas.